Por una nueva Navidade

Pienso que el sentido de la Navidade está bastante perdido en un mundo donde la religión, o las religiones, están perdendo su fuerza y poder. Comparando con otros tiempos vivimos en un mundo poco religioso. Las personas verdaderamente religiosas son muy pocas. Son un grupo en extinción. Para la mayor parte de las personas la Navidad es una fiesta del consumo y de la comida.El encuentro con la família es mucho más una obligación que un deseo o necesidad. No todas las famílias viven en armonia. Y los encuentros familiares pueden ser un verdadero tormento.

Yo vengo practicando un nuevo ritual de Navidad. Lejos de confusión, consumo y de excesos atílicos o alimentarios. Es un tiempo de regeneración. De paz y amor. No es una tarea sencilla. Las tentaciones son muy fuertes. Quedarse lejos de las otras personas es una aventura. Te acusan de todo: Antisocial, marginal, misántropo o excéntrico. Si te niegas a consumir eres acusado de ser pobre o avaricioso.

Los verdaderos momentos de reflexión son necesarios para nuestras vidas. Y, para ello, es imprescindible la soledad. Los otros suelen ejercer sobre nosotros una forma de interferencia y distración. En las fiestas de Navidad y Noche Vieja hay mucha aglomeración de personas. Yo vengo evadiéndome de estos encuentros . Persigo el silencio sobre todo.

Creo que el verdadero sentido de la Navidade consiste en una sana renovación de nuestras vidas. Un eterno empezar de nuevo. Un renacimiento en un mismo cuerpo. A cada momento que pasa no somos más los mismos. Pero no tenemos mucha noción de este proceso tan humano. El tiempo está a nuestro favor y conforme él pasa tenemos que intentar mejorarnos a nosotros mismos.

Yo realmente echo de menos el corto tiempo en que creía en Papa Noel. Para los niños la Navidad es casi siempre una fiesta pues tienen la promesa de los regalos. La figura de Papa Noel está muy a menudo relacionada con la infancia. El problema es que en nuestro tiempo hay un consumo muy exagerado y los niños suelen recibir regalos todos los meses del año. La cultura del consumo es incentivada desde muy temprano y el mito del Papa noel esta perdiendo su sentido. Los chicos son muy suscetibles a la propaganda y esto es malo. El verdadero sentido de la Navidad tiene que ser cultivado todos los dias. Pienso que la niñez es la fase más prejudicada en este proceso de alienación.

Propongo un manifiesto para una nueva Navidad. Las propuestas principales son las siguientes:

En el último mes del año está prohibido el consumo superfluo y la propaganda de cosas que no sean necesarias para una vida sana. Propongo, también, un nuevo modelo de Pápa Noel. No será más un hombremayor con vestimentas rojas. Será una mujer muy guapa acompañada de un niño parecido con el Saci Pererê. Este nuevo mito servirá solamente para los niños muy pobres.
La noche Vieja también cambiará. Será un dia con mucho silencio