Ficha de lectura de EL MONTE DE LAS
ÁNIMAS de Gustavo Adolfo Bécquer.
BECQUER, Gustavo Adolfo. “El monte de las ánimas”. El Contemporáneo.
Madrid. 1861.
Tipo de escrito: Narración, Género: Cuento
Palabras Clave: Muerte, Misterio, Construcción del suspense
RESUMEN
El cuento se inicia con el diálogo entre los
primos Alonso y Beatriz. Él reúne a los cazadores que buscaban a los lobos en
el Monte de las Ánimas para volver a la ciudad de Soria antes del anochecer.
Alonso explica que es noche de todos os santos y, así que sonar la campana, el
monte se llenará de ánimas. Beatriz no cree en su primo, así que él empieza a
narrar la leyenda:
En el monte se ve el convento de los templarios, a
quien, tras la conquista de Soria, el rey trajo para defesa de la ciudad. Entre
los hidalgos y los templarios surgió una enemistad que se volvió en odio
profundo. Estos cazaban todo lo que había en el monte, y los otros trataban de
estorbarlos. Cuando por fin hubo una
guerra entre ellos, las muertes por partes de los dos lados fueron grandes y
amigos y enemigos fueran enterrados lado a lado. Desde entonces, dicen que en
la noche de los difuntos, las ánimas de los muertos salen de sus túmulos y
toman el monte al anochecer.
Transcurrida la leyenda, Alonso le dice a su prima
que luego van a separarse, quizá no volverán a verse, y le regala un joyel para que ella no se olvide de él.
Después de insistir, Beatriz lo acepta, pero en un gesto disimuladamente le dice
que perdió su banda en el monte, justo lo que iba a regalarle a cambio.
Alonso vuelve al monte. Pasan las horas, él no
regresa y Beatriz pasa a oír sonidos raros en su casa y en el pueblo que la
aterrorizan noche adentro. Cuando despierta, descubre a su banda azul ensangrentada
sobre el reclinatorio, justo la que Alonso fue a buscar.
Cuando
llegan los servidores a dar la noticia de que Alonso murió devorado por los
lobos, encuentran a Beatriz “muerta de horror”.
¿Cómo Bécquer construye el misterio?
El cuento cumple con la ordenación clásica de
presentación de la acción, desarrollo y deslace. En él, el uso del dialogo
directo cumple la función de introducir el carácter de los personajes: Alonso,
un cazador valiente y hombre fiel, dispuesto a enfrentar sus miedos para
rescatar la banda de su prima; y Beatriz,
una mujer orgullosa y fría a quien los caprichos lleva a la muerte de su primo.
En el cuento, la construcción del misterio está en
la mezcla de elementos narrativos y descriptivos en los momentos de suspense.
Tras Alonso regalar su joya a Beatriz, en silencio
es llenado con los sonidos del pueblo “[…]la cascada voz de las viejas que
hablan de brujas y de tragos, y el zuñido del aire que hacía crujir los vidrios
de las ojivas, y el triste y monótono doblar de las campanas.” El autor haz uso
de los elementos para aproximarnos de lo sucedido.
En otro momento, durante la noche, mientras
Beatriz intenta dormir, el autor vuelve a echar mano de la descripción. Se oye
los ladridos de los perros distantes, voces, pasos, suspiros ahogados y
respiraciones que “[…] anuncian la presencia de algo que no se ve, y que no
obstante se nota su aproximación en la oscuridad.”
De esta forma, Bécquer acumula sonidos que
producen una imagen sensorial, a cual solamente cesa con la muerta de los
personajes principales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario